¿Sabes lo que es la puericultura? Cuando llega un nuevo miembro a la familia, surgen muchas dudas: cómo debe ser su cuidado, cómo acertar con la alimentación y las tomas, qué le ocurre cuando llora desconsoladamente, o por qué tiene cólicos… Todas estas cuestiones se deben consultar con el pediatra; pero, en la mayoría de las ocasiones, y siempre que no haya un problema de salud, es preferible contar con el apoyo de un puericultor, una figura capacitada para asesorar a los padres sobre el correcto crecimiento de los niños para que se desarrolle una crianza adecuada. Si quieres formarte en este ámbito puedes consultar el Curso online de Puericultor, y enfocar tu carrera profesional hacia este área de la salud infantil.

¿Qué es la puericultura?

Como definición se puede decir que la puericultura se refiere a un conjunto de prácticas relacionadas con la salud infantil, basadas en la crianza de los niños y en su cuidado. De esta forma se busca ayudar a que los menores se desarrollen satisfactoriamente durante sus primeros años de vida. Esta especialidad de la salud se encarga de aportar a las madres y padres la orientación que necesitan sobre el cuidado de sus hijos en sus primeras etapas de crecimiento. Además, se ocupa de identificar a tiempo posibles problemas de salud de los pequeños.

Desde antes del nacimiento, el puericultor ya aconseja y asesora a los futuros padres sobre la crianza y los aspectos más básicos del cuidado del bebé. Entre ellos, está por ejemplo, el tipo de alimentación (promoviendo la lactancia), las diferentes técnicas de cuidados, las pautas esenciales de higiene, etc.

Cuáles son sus características

Entre las características de la puericultura destacan principalmente los cuidados necesarios del niño desde sus primeras semanas de vida. Estos se refieren a diferentes ámbitos: la alimentación, la higiene, el descanso, el vestido, la inmunización, entre muchos otros. Además, los puericultores también se encargan de guiar y asesorar a la madre durante el delicado proceso de recuperación tras el parto.

Esta disciplina tiene el objetivo de procurar que los niños crezcan y se desarrollen fuertes y sanos. No obstante, esto no engloba la salud a nivel físico, sino también a nivel psicológico, socioafectivo y emocional. En suma, esta especialidad se basa en la búsqueda de la promoción de la salud integral del menor. Esto se traduce a prevenir las enfermedades generando herramientas para los padres y madres y asesoramiento en cuestiones como la vacunación, por ejemplo.

Asimismo, los puericultores pueden detectar enfermedades de forma precoz, y ayuda a orientar a los progenitores para optimizar el desarrollo tanto emocional como intelectual del niño.

Tipos de puericultura

Esta disciplina se puede dividir en tres etapas que se especifican según la edad de los niños, como vemos a continuación.

Etapa preconcepcional

En la fase preconcepcoonal el puericultor/a tiene el cometido de asesorar a los padres antes del momento de la concepción. De esta manera, se pueden evitar situaciones de riesgo, informar sobre el desarrollo de enfermedades hereditarias, así como orientar acerca de todo lo que deben saber ante la llegada del bebé: pautas a seguir, primeros cuidados, alimentación, entre otras recomendaciones esenciales.

Etapa prenatal

La etapa prenatal es la que se da antes del nacimiento del bebé y, en este caso, se orienta y educa a los padres sobre los primeros cuidados que requerirá el nuevo miembro de la familia. Además, también prepara a la madre para el parto.

Etapa posnatal

En el periodo posnatal, el más largo, se abarca desde que el bebé nace hasta la primera infancia. La puericultura del recién nacido es la que se aplica en el primer mes del nacimiento, y se basa en analizar el bienestar del bebé, estudiar si existen anomalías de nacimiento, traumas tras el parto o problemas médicos. Igualmente, se evalúa el desarrollo del bebé tanto a nivel físico como neuromuscular. Por su parte, la puericultura del lactante trata a los niños durante su primer año de vida, más concretamente desde el primer mes y hasta que cumplen un año.

Funciones del puericultor

El trabajo del puericultor es de gran calado social, puesto que su labor va más allá de cuidar físicamente del recién nacido o del niño. Y es que el puericultor también se encargará de ayudar a los padres a que el pequeño pueda desarrollar todas sus capacidades (psicomotrices, sociales, cognitivas e intelectuales).

Por tanto, hablamos de una disciplina de la salud que pretende el desarrollo integral del menor. Sobre ello también se incluye la prevención de enfermedades gracias a los cuidados y a los hábitos que se inculquen desde la pequeña infancia. Igualmente, los puericultores establecen una serie de condiciones para anticiparse a determinados problemas del desarrollo infantil mediante la aplicación de los nuevos avances en estimulación temprana.

Diferencias entre pediatría y puericultura

Pediatría y puericultura son dos especialidades que suelen confundirse. Si bien es cierto que ambas se ocupan de la salud infantil y el cuidado de los recién nacidos, pero tienen funciones distintas. El puericultor/a se encarga de prevenir enfermedades en la infancia a través de los cuidados y la crianza. En cambio, el pediatra es el profesional médico que ofrece el tratamiento y la curación de las enfermedades que tienen lugar en la infancia.

El puericultor/a trata que el niño se desarrolle de la forma correcta en todos los niveles e intenta prevenir las enfermedades y el pediatra, como hemos comentado se ocupa de tratar dichas patologías. Por tanto se trata de dos disciplinas que se complementan.

Todos los pediatras, de alguna manera, ponen en práctica los conocimientos básicos de un puericultor a la hora de guiar a los padres, proponerles cuidados para sus hijos o asesorarles sobre cómo debe ser su alimentación. Pero el puericultor irá más allá, e intentará buscar la prevención, así como un desarrollo integral de todos los aspectos de la vida del niño.

De alguna manera se puede decir que un puericultor no necesariamente tiene que ser pediatra, pero, desde luego, un pediatra sí que debería tener conocimientos de puericultura, debido a todos los beneficios que ofrece esta profesión.